Los alimentos  como vehículo de enfermedades

El INAL (Instituto Nacional de Alimentación) es el organismo encargado del Sistema Nacional de Vigilancia Alimentaria, es el que debe realizar tareas de vigilancia de los productos alimenticios, esto es, identificar tempranamente aquellos que no cumplen con el código alimentario Argentino, retirar del mercado los alimentos contaminados, corregir las malas prácticas de manufactura en los establecimientos  elaboradores, emitir alertas sanitarios ante situaciones de riesgo, también debe dar respuestas a los reclamos, consultas o denuncias de los consumidores.

De hecho, frecuentemente, se secuestran alimentos en mal estado: quesos, helados, fiambres, jugos de frutas, etc. Estos alimentos producen gran cantidad de enfermedades, que podrían evitarse con un control bromatológico más eficiente.

Estas son las medidas de prevención que  podemos tomar para no consumir comida en mal estado:

- Lavar la tabla y el cuchillo con el que fue cortada la carne cruda antes de volver a usarla para cortar la cocida, con el fin de evitar el contacto con los gérmenes. Los alimentos  como vehículo de enfermedades

- No comprar pre pizzas, productos lácteos y otros alimentos que no se encuentren en un lugar frio. 

- Cuando se va al supermercado, comprar a último momento los alimentos refrigerados, para evitar romper la cadena de frio.

- Sobre la fecha de vencimiento de los alimentos, se recomienda:

Ser cautelosos con las “ofertas dos por uno”, ya que pueden ser alimentos vencidos o a punto de estarlo.

- No volver a congelar alimentos descongelados.

-No guardar las semiconservas (latas de anchoas, sardinas, atún, jamón) fuera de la heladera, una vez abiertas. 

Los alimentos pueden ocasionar enfermedades a causa de las contaminaciones químicas o biológicas originadas durante su producción, su almacenamiento o su distribución. 

La contaminación química de los alimentos se debe, mayormente, a la presencia de plaguicidas, utilizados en la producción agrícola. Otra fuente de contaminación importante es el uso de aditivos químicos. No todos son tóxicos, pero si muchos de ellos (y además, son especialmente cancerígenos). 

La contaminación biológica resulta aun más peligrosa, y puede producir enfermedades infecciosas (colitis, cólera, tifus, hepatitis A), parasitarias (teniasis, amebiasis, triquinosis) o toxicas (como el botulismo, provocado por la bacteria anaeróbica clostridium botulinum). 

fuente: libro biologia de citologia, anatomia y fisiologia.

genetica, salud y enfermedad. 

En conclusion, los principales contaminantes de los alimentos suelen ser las bacterias Salmonella sp.  Y Staphylococcus aureus, que producen cuadros febriles, diarreicos y de malestar y decaimiento general. Proliferan gracias a la cocción insuficiente o a la ruptura de la cadena de frio. Y el mayor peligro reside en que no alteran las propiedades organolépticas de los alimentos (sabor, aroma) ni su apariencia. Actualmente, ha cobrado importancia una variedad de Escherichia coli que produce la toxina shiga, por lo tanto, siempre es primordial respetar las normas de higiene en la manipulación de los alimentos.

 

Las verduras y las frutas, que se consumirán preferentemente crudas para que no pierdan los minerales y las vitaminas, deben ser lavadas con cuidado con agua potable. 

Se debe cocinar los alimentos el tiempo suficiente para eliminar los microorganismos patógenos.

Marian Garcia.